El milagro de Fernando Denis

Denis, mirando el futuro. Fuente: Fernando Denis.

Días antes del lanzamiento oficial de La geometría del agua, le dije a Fernando: “Oye, este libro tuyo va a ser el mejor del año, vas a ver”, y él simplemente me respondió: “¿Tu crees, Hellman? ¿No estarás exagerando? No es para tanto”. Ayer le llamé porque teníamos una cita para ir a cenar junto al maestro Nicolás Suescún y Leonardo Escobar, y allí, en esa llamada, me comentó: “Hellman, ¿Ya leíste Arcadia? Dicen que la Geometría es el mejor libro del año. Tú me lo dijiste, y yo no te creí” Y sí, era cierto. En el más reciente número de la reconocida revista Arcadia, eligieron a la Geometría del agua como el mejor libro de poesía del año 2009 en Colombia, de Fernando Denis. Yo no podía creerlo. Aunque, la verdad, no fue del todo una sorpresa. La calidad de su poesía habla por sí sola. Al fin nos reunimos y vaya que celebramos…bueno, no tanto. Denis tenía cierta indigestión que lo tenía “marginado” a varias tasas de té, bebida que le encanta. Celebramos en su Park way, barrio entrañable que ama sobremanera. El maestro Suescún estaba feliz, igual que Escobar, y Denis, y yo. Ah, una última cosa. He llamado este pequeño artículo el milagro de Fernando Denis porque su obra esta prácticamente agotada. Sí, un libro de poesía agotado. Denis lo ha conseguido. Ha logrado que la poesía por fin se venda, por fin se lea. A eso lo llamo un verdadero milagro, una verdadera resurrección del género mayor, de la palabra esencial. Será mejor que busquen bien en las librerías, porque en la mayoría de ellas está agotado, es una tarea ardua encontrarlo. La geometría del agua ya lleva su curso, y no hay manera de detenerlo. Ya han programado una segunda edición, en tan sólo quince días a la venta. Para vos, querido amigo, quien sé lee éstas líneas, te mando un fuerte abrazo, y sí, el otro viernes nos veremos nuevamente. A los demás, a los que leen, les dejo este hermoso poema de Fernando:

RETRATO

Otra vez va creciendo la luna en la
sombra vegetal.
El sueño te despierta, anochece,
Vives en los lugares donde respiro
Y bajo la misma luz donde te leo.
En el espeso follaje sestea otra luz.
El otoño; más allá, detrás del río
Que es fiebre y juventud, el mar olfatea
El tiempo de los cazadores de aves
del Caribe
Con colores más vivos.
Un viento estremecido de luz y arpegios
Deslumbra en las aguas tus ojos
Y tu boca
A punto de pronunciar tu nombre.
En la soledad mortal de los que trafican
con pájaros,
y con colores
el cielo enrojece en los sensitivos paisajes de tu memoria.
En las azules atmósferas de las colinas
del norte.
Una niebla de cobre dibuja
Mis manos, después el pecho y el rostro
Allí donde tu deseo me hará recordarte.

Fernando Denis, La geometría del agua, Norma, 2009